La mañana comenzó agitada, cuando inflé la rueda delantera en el parque de bicicletas, estropeé la válvula y no tuve más que pedir asistencia mecánica, pues no podía despegar el tubular, por suerte siempre cargo uno conmigo para dejar en el parque de bicicletas.
Eso me acelero un poco, pero no logro sacarme de carrera. Los primeros metros de la natación, me sentí lento, no cogía el paso de la punta y en el momento que los punteros se dieron cuenta que no iban en la ruta correcta, el grupo se disperso y logré llegar a los pies de los punteros. Y como es costumbre remonte hasta quedar en el cuarto puesto hasta que de nuevo el grupo se dividió y cogí por el lado que no era, nos abrimos mucho y de ahí en adelante fue un solo esfuerzo para llegar a la punta y correr los 600 m. de la transición con el corazón en la mano, me quite el speedsuit de Aqua Sphere y cogí la bici y seguí corriendo. Nade un minuto más lento que el año pasado.
Logre conectar la punta y en la bici me sentí fuerte, rápido, pero cuide energía y me ubique atrás, dejando los 10 m. reglamentarios o más, pues no quería otra roja. Fontana y Rhodes tuvieron tarjeta y esto me alerto para no acercarme mucho. Pase en dos ocasiones a la punta pero fui rebasado rápidamente. La última vez que lo hice fue faltando 5 km. en el último punto de hidratación. Me paso James Hardley y a los pocos metros cogió una pequeña piedra, que descontrolo su bicicleta y lo mando contra los matorrales. Así que ahora éramos solo cuatro: Andi Boecherer, campeón europeo 70.3, James Reed, Balazs Czoke, campeón ironman y yo.
Pase de segundo el tapete de entrada a la transición y marque mi mejor tiempo en bicicleta hasta el momento, 2 horas 8 min. 3 segundos. Estaba contento pero no sabía cómo iban a reaccionar las piernas después de este es fuerzo, en ese momento ni me acordaba del mundial de Las Vegas, que fue hace ocho días. Hasta aquí había solucionado todos los obstáculos que se me habían presentado, el pinchazo, la mala salida del agua, la perdida y el no caer en el juego del drafting, sin quedarme del lote puntero.
Salí a correr y como siempre comparo me di cuenta que el paso era más lento que el del año pasado, así que decidí no mirar mas el reloj, además el pulso ya iba bastante elevado. Salí de tercero pero Balazs me paso rápidamente y se comenzaron a ir, así que fui por él y me ubique en tercer lugar. La primera vuelta estuvo bien, pero la cacería que venía por mí no era fácil y todo se unió para que me cogieran: las piernas se me cargaron y me pesaban, no podía soportar el calor y mentalmente me había desconectado, los malos pensamientos me invadieron y deje pensar en los de adelante y me fije en los de atrás.
Al kilometro 12 o 13 Fontana me alcanzo y sabia que Hardley venia cerca. Pero no encontraba esa chispa, ni la cabeza para sufrir más, ni lograba enfriarme, solo rogaba por una nube. De vuelta faltando 5.5 km. vi que Hardley venía a unos 45 seg. Y Balazs a 1 min. Y algo. De la nada la energía regreso y Dios escucho mi pedido y pasaron unas nubes que bajaron la temperatura un poco. Volví a correr rápido y estaba seguro que ese 4to puesto era mío, hasta comencé a buscar el tercero. Es como si me hubiese resetiado.
Hasta que faltando dos kilómetros, de la nada Balazs me pasó, trate de pegarme pero iba muy fuerte. La energía me había llegado muy tarde y era 5to de nuevo, corrí 3 min. Más lento que el año pasado, pero mejore 3 min. En el tiempo final. Termine un poco triste porque el pódium se perdió por 1 min. 10 y el 4to por 30.
Realmente me dolió, pues fue una muy buena oportunidad, pero hay que ser consciente que hace 8 días corrí el mundial de 70.3 y todo lo que ello conlleva, cambio de horario, viaje, etc. Y cuando las piernas no están frescas es difícil que la cabeza piense claramente.
Siendo autocritico me falto sufrir, me falto creérmela, pero hay cosas positivas como el hecho que el estomago nunca me molesto y que encontré lo que debo tomar en la bici, sustained energy de hammer y hammer gels, o cualquier bebida de este estilo, que me permita tomar menos geles.
También positivo el acomodarme bien en esta Quintana Roo, ya monto cómodo y no tengo que quitarme del acople para nada. Positivo que el tobillo no molesto y que se que me estoy recuperando bastante rápido entre carreras. Y por último que no me deje derrotar y mantuve la calma en los momentos claves, a excepción del trote.
Gracias por todos los mensajes y el apoyo en línea, por eso duele, porque los ilusione con un pódium y salí con un quinto. Gracias a Luis Vargas de Mark Allen Online, a Jaime por el apoyo en la Carrera y durante todo el viajes, a Miguel de Aqua Sphere, a la gente de Mack Cycle en Miami, a Quintana Roo, a Martha de Terra Pack, a Michael de ASEA y a mi equipo 226 Merey, especialmente al profe Oswaldo. Y por su puesto a mi novia, que está ahí siempre al igual que mi familia, en especial a mi Mama, mi fan no. 1(bueno empatada con Jineth) o sino que lo digan quienes tienen Facebook.
Felicitaciones a Rodrigo Acevedo por pasarse a Pro, aceptar este reto y hacerlo de esa forma, que presnte y futuro!!!
Tambien aprovecho para felicitar a Juan Sebastain Rubio, compañero y pupilo en 226 por los excelentes resultados en el nacional sprint y olimpico, ubicandose como el mejor juevenil y quinto en la elite.
Iniciando mi carrera deportiva como nadador, la curiosidad de mi papá me llevó a iniciarme en este deporte, triatlones cortos y de distancia olímpica, sin embargo nuevamente la curiosidad me llevó a probar suerte en, lo que es hoy mi vida, la larga distancia, permitiéndome obtener destacados resultados y una carrera como atleta profesional. Adicionalmente soy Entrenador, guiando a otros en el proceso de convertirse en mejores atletas.
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Andres, Te veo muy bien. Felicitaciones. I think you are on the right way. You are doing a good job. Congratulations.
ResponderBorrarAsi se hace, eso es dar buen ejemplo a la juventud de Colombia y del mundo entero.
Recuerda que la constancia vence lo que la dicha no alcanza, y que el que persevera triunfa.